Causas de pérdida de la memoria

Son numerosas las personas que se inquietan ante la posibilidad de volverse olvidadizas. Consideran que la falta de memoria constituye el primer signo de la enfermedad de Alzheimer. No obstante, no todas las causas de pérdida de la memoria presentan problemas relacionados con el Alzheimer.

Puesto que el envejecimiento, las afecciones médicas, los problemas emocionales, el deterioro cognitivo leve u otro tipo de demencia son otras de las causas de los problemas de memoria.

Pérdida de memoria por envejecimiento

El olvido es una parte normal del envejecimiento. Cuando las personas envejecen, aparecen modificaciones en todas las partes del cuerpo, incluyendo el cerebro. 

En consecuencia, hay quienes observan que les lleva más tiempo aprender cosas nuevas, o no recuerdan la información tan bien como antes, es decir, pierden cosas como las gafas. 

Por lo general, se trata de signos de olvido leve, no de problemas de memoria graves, como la enfermedad de Alzheimer.

Se puede identificar si se trata de la pérdida de memoria por envejecimiento normal o Alzheimer de varias maneras.

En la pérdida de memoria por envejecimiento puede ocurrir esto:

  • Tomar una mala decisión de vez en cuando;
  • Dejar de pagar una mensualidad;
  • Olvidar qué día es y recordarlo después;
  • Perder cosas de vez en cuando;
  • Olvidar a veces qué palabra decir.

En la pérdida de memoria originada por el Alzheimer pueden notarse estas características: 

  • Tomar juicios y decisiones equivocadas con mucha frecuencia;
  • Perder la noción de la fecha o la época del año;
  • Problemas para mantener una conversación;
  • Extraviar cosas a menudo y ser incapaz de encontrarlas;
  • Pérdida de memoria relacionada con enfermedades.

Pérdida de memoria por enfermedades

En el curso de estimulación cognitiva aprendimos que determinadas afecciones médicas suelen causar graves problemas de memoria. Los problemas deberían desaparecer una vez que la persona recibe tratamiento. Entre las enfermedades que pueden causar problemas de memoria se encuentran las siguientes:

  • Tumores, coágulos de sangre o infecciones en el cerebro;
  • Algunos trastornos de la tiroides, los riñones o el hígado;
  • Beber demasiado alcohol;
  • Traumatismos craneales, como una conmoción cerebral por una caída o un accidente;
  • Efectos secundarios de los medicamentos;
  • No consumir suficientes alimentos saludables, o tener muy pocas vitaminas y minerales en el organismo (como la vitamina B12).

En estas situaciones, para tratar las afecciones médicas graves, es necesario que un médico las trate lo antes posible.

Pérdida de memoria asociada a problemas emocionales

Las emociones, como el estrés, la ansiedad o la depresión, aumentan la capacidad de olvido y se convierten en demencia. Tratar de afrontar estos cambios en la vida hace que algunas personas se sientan confusas u olvidadizas.

Por consiguiente, la confusión y el olvido causados por las emociones suelen ser temporales y desaparecen cuando los sentimientos se desvanecen.

Además, el tratamiento puede incluir asesoramiento, medicación o ambos. Mantenerse activo y aprender nuevas habilidades también puede ayudar a la persona a sentirse mejor y a mejorar su memoria.

En cualquiera de los casos anteriores, pueden usarse medicamentos y actividades que fortalezcan la memoria en todas las edades.